Mariela: Tengo un sueño...
Andrea: ¿Dormiste poco?
Mariela: Bueno, es que anoche Adri [marido] me dice, "Necesito que para mañana a la mañana me laves y me planches el pantalón, porque tengo una reunión con provedores".
Andrea: Uuuy.
Mariela: Así que a las 11 de la noche le lavé el pantalón a mano y lo colgué en la terraza. Esta mañana me levanté a las 6 y por suerte ya estaba seco, así que se lo planché.
Andrea: Qué buena que sos.
Mariela: Sí, eso mismo me dijo Adri, "Qué buena que sos".

rutinas

Volviendo al tema de lo que come la gente en la oficina, tema que me resulta apasionante, déjenme contarles esta observación. Hace un mes que trabajo acá y en estos últimos 30 días, Ariel, el secretario, almorzó exctamente lo mismo todos los días: pollo a la plancha con ensalada de lechuga y tomate. Todos.los.días.

shisus

Jesús, el director administrativo, es muy dado a comentarme temas de actualidad. Hoy, por ejemplo, me habló un rato de la crisis europea y el envejecimiento poblacional que aqueja a Italia y España. "Italia tiene que repatriar italianos como pueda", me dice "porque si no se les va a llenar el país de moros (SIC), que son los únicos que tienen hijos". Yo abrí los ojos grandes y él se vio obligado a aclarar: "Bueno, moros, negros, imnigrantes, no blanquitos europeos".

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Andrea de Diseño Gráfico

Recordarán que señalé una ocasión en la que Andrea de Diseño Gráfico almorzó un yogur Ser. Bueno, resulta que ése era un día de descontrol y permisividad para ella. Lo normal para Andrea, tal como lo pude comprobar en los últimos 15 días, es no almorzar nada. Ni desayunar ni merendar tampoco. Es decir, no ingiere nada más que agua en las 9 horas que compartimos diariamente.

Asumimos que en su casa sí come, porque si bien es una chica delgada, tampoco está desnutrida y se mantiene en pie.

A mí - que me vendrían muy bien 15 días de pura agua - me resulta muy difícil imaginar una jornada laboral de 9hs en ayunas. Si estoy muerta de hambre no puedo pensar con claridad.

Se ve que Andrea puede.

lo intentaré

Bueno, hay que rescatar este blog ahora o nunca. No sé si va a funcionar. Por un lado siento que no voy a tener material interesante, por otro lado creo que es porque me voy acostumbrando al lugar y la gente con la que trabajo, y de a poco todo me va dejando de sorprender. Pero eso está mal, no me quiero acostumbrar a esto, quiero conservar la distancia.

Me compré jazmines y los puse en mi escritorio para que la cosa sea más llevadera.

diciembre

A las chicas de Diseño Gráfico les acaba de dar un ataque de euforia cuando Marta les dijo que busquen “las cosas de Navidad” y decoren la oficina.

el ser y la nada

Ayer Andrea de Diseño Gráfico almorzó un yogur Ser de vainilla.